Zacatecas – Matices Verdes

mayo 6th, 2010 by Jesus Lau

AMBAC - reporte

Este es un recuento personal de las Jornadas Mexicanas de Biblioteconomía, organizadas por la Asociación Mexicana de Bibliotecarios en la Ciudad de Zacatecas, del 3-5 de mayo, 2010; hecho especialmente para aquellos que no tuvieron la oportunidad de asistir a este magno evento anual de AMBAC.

Zacatecas – Modernidad. El verde olivo tierno, a veces llamado verde limón o verde Nilo, enmarcaba la entrada de las XLI Jornadas Mexicanas de Biblioteconomía, con tres grandes telas de chiffon, que ondeaban fijamente desde el techo, del moderno Rep -unoPalacio de Convenciones de Zacatecas, el cual tiene gigantescos vidrios templados que cubren su fachada geométrica, que con libertad visual permite la vista, de la majestuosa cordillera de lomas bajas, color rojo óxido, que se levantan al norte de la ciudad.  El Palacio, ubicado a su vez, en una colina de la casi terminada Ciudad Gobierno, que integra todas las oficinas del gobierno de Zacatecas, en edificios color blanco perla, divididos por una gran escalinata, complementada por empinados accesos y avenidas, que forma una especie de nueva Brasilia, o un pequeño Helsinki o Petersburgo, sin canales, pero con su sello distintivo de estar en una montaña baja.  Esta modernidad fue un contraste comparado con el bello centro histórico de la ciudad, que es uno de los más bonitos de México y ciertamente también de América Latina, denominado Patrimonio Cultural de la Humanidad por UNESCO.

Inauguración de Jornadas. La ceremonia de apertura contó con los discursos de autoridades locales y del presidente de AMBAC, el que suscribe, donde se lanzó la campaña de donativos “Alhajas”, para remodelar las oficinas de la Asociación, a cargo de Estela Morales, quien, de un solo jirón, levantó el manto verde que cubría la maqueta, planos y lajas (cortes de cantera tipo ladrillo) del proyecto, y dio su “bendición”, lanzando confeti a la mesa.  Igualmente, se dio el primer “Clic”  para inaugurar el nuevo y funcional portal AMBAC, desarrollado por Reymundo Juárez, por parte del Secretario Académico de la Universidad Autónoma de Zacatecas.  La ceremonia tuvo dos intermedios musicales con el cuarteto de cámara Orfeo, que tocó entre otras piezas, la marcha Aida de Verdi y la conocida Marcha de Zacatecas de Genaro Codina.

Programa profesional. El programa, con el lema “Bibliotecas: el pasado como prólogo y el futuro como desafío”, incluyó 83 trabajos, donde participaron 132 autores, entre ponencias, presentaciones cartel, mesas redondas y el popular Cine Debate.  La convocatoria general se lanzó en las pasadas Jornadas, recibiendo más de 100 propuestas de ponencias.  Las sesiones se realizaron con la facilitación de 20 moderadores.  Los participantes, en general, procedieron de la mayoría, si no es que todos, los estados del país, más algunos participantes extranjeros de Chile, Colombia, España, Estados Unidos, e Inglaterra.  Los tres ponentes magistrales fueron Roberta Stevens, Presidente Electa de ALA; Jaime Río, Director del CUIB; y Sergio Almazán, Director General de la Cámara Minera de México.  El día previo a Jornadas iniciaron dos talleres y el lunes otros tres, cada uno con duración de ocho horas distribuidas en dos días, los cuales se ofrecieron en las instalaciones de la Universidad Autónoma de Zacatecas y el Instituto Tecnológico de Zacatecas.  Este año, como novedad se ofreció un taller satélite ofrecido presencialmente en Saltillo.  Otro detalle especial fue el homenaje póstumo a Elvia Barberena, ex Presidente y Socia Honoraria de AMBAC, así como la mesa redonda sobre “Bibliotecas: el Centenario y Bicentenario de México”, en alusión al Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución Mexicana.

Exposición – Auditorios. Los mencionados mantos transparentes de Chiffon de tono verde tierno, daban la bienvenida al pasillo que zigzagueaba la exposición comercial, que reunió a las mejores empresas nacionales e internacionales del mercado de la información, y que fue más grande que el año anterior.  A los lados, estaban los cuatro grandes auditorios, dos a cada vera, que se bautizaron con los nombres de cuatro distinguidos bibliotecólogos, dos de ellos que trabajaron preponderantemente en la Ciudad de Mexico: Roberto Gordillo, y Pedro Zamora; uno en provincia, Vicente Sáenz; y otro internacional, Josefa Sabor de Argentina.  Los tonos de las mamparas de los auditorios eran coincidentemente de la misma gama, del ya multicitado, verde primaveral tempranero, lo que le daba un remate decorativo de armonía, que lucía espacioso con los altos cielos del Palacio de Convenciones.

Palacio de convenciones – Alimentos. El espacio rentado para Jornadas fue el más grande que se tenga registrado en las Jornadas AMBAC (datan de 1956), lo cual todavía aumentó gracias al apoyo del Palacio de Convenciones, que nos facilitó más espacio del rentado, dedicando toda una ala aireada y de regia vista al exterior, que sirvió de restaurante y lugar de encuentro para los asistentes a Jornadas.  Las comidas se contrataron a un proveedor local que ofreció una variedad de guisados, sopas, ensaladas y panes, en servicio de buffet, y bebidas y postres por un precio adicional.

Patrocinio. El evento tuvo un buen patrocinio, ocho empresas contribuyeron con financiamiento para diversos rubros, lo que permitió, como siempre, dar un precio subsidiado de registro de Jornadas a todos los participantes.  Los benefactores del congreso fueron: Grupo Fresnillo/Peñoles, Baratz de México, Cengage Learning, In4Mex, Infoestratégica, Encyclopaedia Britannica, Librería Médica 20 de Noviembre y V|lex.

Festividad Cultural. Por primera vez en Jornadas, todos los recesos y los eventos sociales, más las horas de comida fueron amenizados con música o presentaciones de grupos de baile, para dar un ambiente festivo a la exposición y al congreso en general.  En total se presentaron 2 cuadros de danza folclórica, 3 de música cantada por la soprano Sonia Medrano y 2 de música de cuartetos y bandas, más los cuatro grandes eventos sociales nocturnos principales.

Eventos sociales – Pre-Inicio. Se organizó un paseo dominical a la ciudad de Fresnillo, donde participaron cerca de 140 asistentes, patrocinados por el conglomerado minero Grupo Fresnillo/Peñoles, para visitar la mina del mismo nombre, la más rica en plata del mundo, donde ordenadamente se dio un recorrido por sus intestinos: pasillos y boquetes hechos a la mina a través de los años,  para extraer sus riquezas minerales.  La mina está restaurada y acondicionada, para dar cómodos recorridos turísticos, con luz interior, pasillos y una muestra de herramientas, maquinaria y ropa usada por mineros a lo largo de los oscuros senderos.   Al concluir se ofreció un lonche en el parque de los “Jales” (tierra extraída de la mina), donde había lanchas y bicicletas.  Al final, se hizo un recorrido del museo, ubicado en el casco de la hacienda construida por los dueños originales del siglo XVIII.  En la tarde del domingo se tuvo, además un coctel financiado por AMBAC, en los bien cuidados jardines del edificio, el Ex-Convento de San Agustín, del conocido Museo Rafael Coronel,  que lucía regiamente su arquitectura iluminada y al fondo, a la distancia, el Cerro de la Bufa con su mirador, que parecía un castillo, todo bañado de luz.

Eventos sociales – Durante Jornadas. El lunes, en el recién remodelado patio interior de la Ciudadela del Arte, un edificio colonial que originalmente albergó a la Universidad Autónoma de Zacatecas, se realizó el segundo coctel, amenizado por un grupo de cuerdas de música popular, patrocinado también por la empresa minera Grupo Fresnillo/Peñoles.  El segundo día, al concluir las sesiones, se tuvo una callejoneada, para aquellos que no conocen este término, una caminata o romería, con una banda zacatecana al frente que tocaba música mexicana, haciendo paradas en plazas y cruceros en el centro histórico de la ciudad, para que bailaran los participantes al ritmo de la tambora, la cual era aderezada con mezcal de la región, que se servia en pequeños tarritos de barro, colgados al cuello con listón amarillo.  La romería que cruzó todo el centro histórico, bailó, cantó y disfrutó la cálida noche que caracterizó ese martes de Jornadas.  Al final de la callejoneada se presentó una excelente proyección multimedia en la fachada del ex – templo de San Agustín, tipo luz y sonido, que nos deleitó con un viaje visual del centenario de la Revolución Mexicana.  Otras actividades sociales/culturales extras fueron una visita al Cerro de la Bufa y visitas a tres bibliotecas, entre ellas la Biblioteca Pública Central, los días lunes y martes.

Comité Local. Las Jornadas se organizaron en un tiempo corto, a partir de octubre del 2009, porque la Mesa Directiva tomó posesión casi cinco meses más tarde de lo normal, sin embargo, los tiempos se optimizaron gracias al gran apoyo del comité local, integrado por miembros de la Red Estatal de Bibliotecas de Educación Superior de Zacatecas (REBIEZ), bajo la presidencia de Alina Díaz y la Red de Bibliotecas Públicas del Estado, a cargo de Alfredo Sánchez, quienes contribuyeron con donativos en especie: espacios, equipo, vehículo, cobertura en medios, logística general y sobre todo tiempo de horas hombre/mujer y con la gran hospitalidad que nos brindaron a todos.

Ejército de voluntarios y asistentes. Jornadas es, cabe enfatizar, un evento organizado por voluntarios.  En esta tarea cabe destacar la labor de la Presidente de la Comisión de Juntas, Conferencias y Congresos, Asunción Mendoza (Universidad La Salle), quien tuvo a cargo la logística general de Jornadas, su trabajo fue agotador y de renuncia a todo su tiempo personal y parte del laboral, para dedicarlos a Jornadas antes y durante las mismas.  El programa de ponencias estuvo a cargo de Oscar Saavedra, Vicepresidente, y en los talleres, la Presidente de la Comisión de Fomento Bibliotecario, Lourdes Quiroa (Colmex), y con el valiosísimo apoyo, mencionado antes, de Alina Díaz (Presidente de la Red Estatal de Bibliotecas de Instituciones Superiores) y Alfredo Sánchez (Coordinación de Bibliotecas Públicas), de la red REBIEZ, encabezando el Comité Local.  Como parte de estas comisiones participaron los siguientes grupos de voluntarios: 32 edecanes (Tolosa e ITESM), cuatro asistentes en programa de ponencias (Universidad Veracruzana), dos asistentes de logística general (Universidad La Salle), así como alrededor de 30 personas de diversas organizaciones.  Más la Mesa Directiva que coordinó diversas funciones.

Próximas Jornadas, 2011. Como se comunicó, a través de la convocatoria que se distribuyó en estas Jornadas, la sede para el siguiente año se cambió a la ciudad de San Luis Potosí, para los días 4-6 de mayo, miércoles a viernes, y martes 3 exclusivamente para talleres.  Se realizará en el segundo centro de convenciones más grande del centro del país, que inaugura el mes siguiente la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.  La Escuela de Ciencias de la Información, que dirige Patricia Ramos Fandiño, será la entidad anfitriona, de dicha casa de estudios, de las XLII Jornadas Mexicanas de Biblioteconomía, con el tema “Bibliotecas y liderazgo en tiempos de transición”.  ¡Los esperamos en la capital potosina!

Retos de organización. Como en años anteriores, tuvimos retos con el registro, el cual urge automatizar e invertir en sistema de equipo y software, que permita la inscripción en línea, y genere constancias y facturas, además de llevar la contabilidad de este rubro.  El hotel, el único que tenía el tamaño requerido en toda la ciudad, fue de cuatro estrellas, y con servicios del mismo nivel, distribuido en  una colina, por lo tanto tenía pasillos sinuosos y cuartos, una sección, bastante alejada del vestíbulo principal.  El hotel nos ofreció parte del servicio de transporte al lugar de Jornadas y eventos culturales, así como las sillas que se usaron en el Palacio de Convenciones.  Su restaurante tenía un servicio modesto y de platillos con cierta indefinición culinaria.  La inauguración estuvo un poco retrasada por logística, pero no afectó el resto del programa, porque se había dado tiempo amplio.  Algunos eventos culturales también tuvieron inicios retrasados, sin embargo el programa de ponencias, parte medular de Jornadas, estuvo puntual, porque los ponentes tenían 45 minutos cada uno para su presentación y discusión por parte del público.  En cuanto a los ofrecimientos locales, se tuvieron cambios de última hora que hicieron entrar en “urgencia” a todo el comité de logística.  La oficina de turismo avisó un día antes y en día festivo, 1º de Mayo, que cancelaba el coctel del domingo, así que con gran prisa y dificultades se tuvo que conseguir un proveedor de servicios, para el día siguiente y la Asociación asumir el costo del mismo.  Igual curso tuvieron varios apoyos locales, como en los talleres que dos días antes se tuvieron que buscar nuevas sedes, porque las ofrecidas no se podrían prestar, y algunos grupos artísticos que cancelaron sus participación en la víspera, porque se había declarado el lunes como día de descanso (Mayo 3) en sus instituciones, y por lo tanto no laboraban.  Igualmente, se pidió apoyo a los coordinadores del comité local, y se contrataron sedes y grupos alternos, algunos de los cuales fueron pagados por la Asociación, para cumplir con el programa oficial de Jornadas, que ya había sido publicado.

Conclusión. El resultado final de las XLI Jornadas Mexicanas de Biblioteconomía fue muy bueno, tuvimos el congreso con los espacios más amplios en la historia registrada de AMBAC; en un centro de convenciones, que no se contrataba desde las Jornadas celebradas en Ixtapa en 2005.  Así mismo, se organizó una agenda de eventos culturales, sociales y festivos que no se tenía desde los años 80s, es decir hace más de veinte años, que permitieron socializar y contactar tanto a colegas como proveedores que seguramente redundara en un mutuo beneficio.  El programa de ponencias también rompió récord en número de trabajos, todo bajo el marco de la historia de más de 460 años de la ciudad de Zacatecas, que cuenta con uno de los centros históricos más bonitos del país, declarado, como se mencionó, Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO, que está serpenteado por callejones y calles estrechas, y con regios edificios de fachadas de cantera, limpias y remozadas, que daban dignamente un marco colonial y post-colonial a esta otrora ciudad minera.  Por primera vez se mantuvo informada a la comunidad bibliotecaria en tiempo real y al día sobre lo acontecido a través de las herramientas sociales Twitter y Facebook con más de 150 seguidores entre los que destacan varios colegas nacionales e internacionales. Igualmente, la cobertura en medios masivos fue excelente, se publicaron notas en los periódicos locales, se transmitieron spots de radio todos los días y los canales de televisión trasmitieron noticias diarias y hasta se dedicó un programa de una hora en el canal estatal, con la participación del que suscribe.  Los lienzos transparentes, de matices verdes, que bordearon la entrada a las Jornadas fueron testigos de un congreso de éxito, que patentó la convención, como la más importante del país, por su contenido profesional y su exposición comercial.  ¡Un cálido agradecimiento a todos los que hicieron posible estas Jornadas!